Son tornillos que se usan para reemplazar la raíz de uno o varios dientes perdidos. Este tipo de procedimiento se realizan para restaurar de forma permanente la función de masticación y mejorar la estética de la sonrisa.
Tipos de implantes:
· Implantes convencionales: se usan cuando el paciente tiene suficiente hueso en los maxilares, varían de 7, 8.5, 10, 11.5, 13 mm, dependiendo la casa comercial.
· Implantes zigomáticos: se usan en arco superior cuando el paciente no tiene hueso en el maxilar y los senos maxilares están muy neumatizados. Este procedimiento se realiza en quirófano bajo anestesia general. Los implantes son largos, de 30 a 50mm, que van fijados en el hueso malar
· Zirconio: es un metal blanco, es biocompatible con el hueso y los tejidos resistente, no conduce electricidad, no produce alergia a metales, y es más estético en caso de retracción de la encía.
Materiales:
· Titanio: es un metal gris, biocompatible.
· Zirconio: es un metal blanco, es biocompatible con el hueso y los tejidos resistente, no conduce electricidad, no produce alergia a metales, más estético en caso de retracción de la encía.
¿Quién requiere implante?
Todas las personas que hayan perdido una o más piezas dentales por cualquier causa, con la finalidad de soportar una corona o una prótesis.
¿Cómo se colocan?
Actualmente, hay 2 técnicas de cirugía para colocar los implantes:
· Técnica convencional: se realiza una incisión en la encía, se expone el hueso para hacer el nicho o preparación y colocar el implante; posteriormente, se sutura y se espera cicatrización.
· Técnica con planeación digital: se realizan estudios clínicos (tomografía y scaner intraoral), con software de planeación a computador se define la adecuada posición del implante, y se realiza una guía para la cirugía, con esta solo se realiza la preparación y la colocación del implante, siendo esta más precisa, predecible, genera menor dolor y menor inflamación.
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